Un juicio cuatro idiomas

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Un juicio cuatro idiomas

Del 20 al 31 de mayo, AIIC España organiza en el Centro Cultural Galileo una exposición conmemorativa del nacimiento de una profesión vital en las relaciones internacionales como es la interpretación en conferencias. Una muestra que se presenta con motivo de la profesionalización de la interpretación de idiomas en conferencia, debido al próximo aniversario de los juicios de Nuremberg.

La exposición trae por primera vez a España una muestra que AIIC ha presentado en países como Alemania, Suiza, Francia, Grecia, EAU e Italia. Una muestra que arroja luz sobre el papel decisivo de profesionales que suelen actuar entre bastidores, pero sin los cuales no habrían podido tener lugar grandes momentos históricos.

Uno de esos momentos fue el Juicio de Núremberg, celebrado en esa ciudad alemana entre noviembre de 1945 y agosto de 1946, tras concluir la Segunda Guerra Mundial. El estatuto del Tribunal Militar Internacional, constituido al final del conflicto para juzgar los crímenes nazis, estipulaba que los reos tendrían derecho a escuchar el proceso en una lengua que pudiesen comprender, para garantizar a su vez su debido derecho a la defensa. Dicha exigencia planteaba un reto.

La solución consistió en utilizar por primera vez, con carácter oficial y no experimental, la interpretación simultánea. Así pues, un equipo de 36 intrépidos intérpretes, divididos en tres grupos de doce integrantes cada uno, se instaló en cabinas protegidas por placas de vidrio, dotadas de un sistema de auriculares, micrófonos y cables, e hizo posible que la humanidad conociese – y que el tribunal juzgase – las atrocidades cometidas por el Tercer Reich. De esta forma se juzgaron 117 crímenes. Doce de los 22 acusados fueron condenados a muerte, siete a penas de prisión y tres resultaron absueltos. El Tribunal Militar Internacional establecido en Núremberg sirvió de modelo para el Tribunal Penal Internacional de La Haya (Países Bajos).

El servicio de interpretación y su sistema de relevos, cabinas y combinación lingüística servirían por su parte de modelo para una profesión que ascendería a otro nivel a partir de entonces.

Comisariada por la intérprete alemana Elke Limberger-Katsumi, la exposición Un juicio, cuatro idiomas no se limita solo a los intérpretes de conferencia y a los traductores. Su relevancia alcanza a cualquier persona que se interese por la historia, las relaciones internacionales, la economía, el derecho, la diplomacia, la cultura, la tecnología o los derechos humanos, entre otros temas.

Créditos imágenes:

Un juicio cuatro idiomas © AIIC Italia

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